jueves, 4 de junio de 2015

Nido vacío

La mano que impide
el entendimiento
no es blanca ni es negra
tan solo un tormento
que niega bondades
y corta el aliento
dejando el cuerpo sediento
del amor y de afecto, 
retorciéndose por dentro.

La boca que escupe
veneno escondido,
no es buena ni es fatua,
es un gran peligro
que extiende rumores
y apaga el sentido,
porque nublando su corazón
por sentirse herido,
escupe por boca
cosas sin sentido.

El silencio que otorga
la voz al más fuerte
no es sordo ni ciego,
pero está presente,
esperando escondido
fortalece lo indecente,
que campa a sus anchas
por donde quiere.
mientras ella permanece
doloriéndose por el ausente,
carente de caricias y abrazos
dónde mecerse.

Si la mano no agarra
al que está caído
y la boca no sirve
para dar alivio,
entonces el silencio mata
al amor mismo,
haciendo del nido
un hueco perdido
carente de sentido,
dejando en dolor
el nido vacío.