domingo, 29 de agosto de 2010

Vivir revolviendo


Mi espacio,
único,
me pertenece,
lo compartiré
con quien quiera
y quien merece,
quien sepa
andar sin trabas
aunque tropiece.

Aquel que aprecia
lo que dentro llevo,
vivirá revolviendo,
conmigo jugando,
juntos riendo,
el que vea formas
en la nubes,
más allá de un simple cielo,
jugará en mis adentros,
revolviéndose entre ellos.

Si te importan las formas,
antes que dar un te quiero,
si la expresión te asusta
y el rebosar te da miedo,
busca otro lugar tranquilo,
donde el viento no haga ruido,
donde la mar no sea brava
o donde el sol no de brillo,
ni los unicornios beban
agua fresca de algún río,
ve donde está lo sabido,
lo correcto,
lo insulso y conocido.

martes, 24 de agosto de 2010

Hacia dónde


Hacia donde el aire despierta
y la luz se refleja 
en multitud de colores
brillando nobles.

Donde la paz está atenta
y no hay lugar a protesta
de quien es la más bella
entre la multitud de flores.

Hacia donde van los amores,
los encuentros
y los pasos del camino
equivocados o ciertos.

Hacia donde los sonidos
se mezclan con sus sabores,
donde el perseverante destino
da la mano y te recoge,
donde un arco iris de sueños
asoma por entre el bosque, 
donde buenas intenciones
no se esconden.

Donde el abrazo es hermano
la confianza plena,
el sonreír cercano
y la mirada tierna,
ahí donde la luz
de sol y de luna
se entremezclan,
ahí donde el amor reina.

Lugar de recreo,
inmensidad
o eterno tiempo
de sentimiento pleno,
ahí es donde yo
dirijo el vuelo.

lunes, 23 de agosto de 2010

Lo que tú ves


Los abrazos de vida
conviertes en cuerdas,

los besos de amor
en cadenas,
la libertad de vida,
en una estrecha
y mugrienta celda...
y para ti,
lo que tú ves cuenta
y el modo en que ves
la vida,
te pone alerta.

Miro tu rostro,
escucho tus palabras
y veo tu sentir,
el que escondes
y racionas,
que veneras
y abandonas
por reservas aprendidas,
por tu memoria,
y en tu ver olvidas
lo sencillo que es vivir,
amar y sentir.

Vivir sin miedo a morir,
amar sin miedo a sufrir,
sentir sin miedo a ser.

Tranquilo,
mi mirada solo es
la expresión del amor
que me conecta
a disfrutar su momento,
sin pedir ni rendir cuentas,
y es que veo lo que tú ves
dado la vuelta 
y puesto del revés.

domingo, 22 de agosto de 2010

Aroma de vida


Cuando el miedo arrecia,
los olores de vida se deshacen
para encontrar lo mugriento,
lo pútrido,
lo infecto,
el miedo se nutre de ello
bailando contento por dentro.

El aroma se pierde,
la fragancia
y el perfume
que el amor desprende
se desvanece,
por ponerse mascarilla
para evitar
el aliento de vida
que trae el viento,
así se pierden las risas,
los goces de cuerpos
que dan consuelo,
los abrazos sencillos,
las caricias de cielo.

Destapar el frasco
de los aromas de vida,
olerlos profundo,
hasta que empapen por dentro
y agradecer los días
que aprecias un olor de vida nuevo.

lunes, 16 de agosto de 2010

A dónde van esos besos



Se pierden los besos
entre los recuerdos
de antiguas caricias,
dadas con manos
que brindan silencios,
que ofrecen miradas
llenas de sentimiento.

Se pierden los besos
buscando su sitio,
allí donde los reciban
con corazón limpio,
con sonrisa amplia
y espíritu nítido.

Se pierden los besos
donde la confianza se pierde
y el amor se pierde,
donde la mentira crece
y el alma adolece
de no saber lo que quiere,
ahí es donde los besos se pierden.

viernes, 6 de agosto de 2010

Cuentos de hadas

eohpoesía
Enormemente bella,
en su dulzura,
con su sana sonrisa
y su ternura,
se adentra en la guarida
del implacable hielo,
que le invita a una cena,
fría y sin estrellas en el cielo.

Lo ve desde el principio
y aún así se queda,
sabiendo que sus noches

son más bellas,
sabiéndose más serena,
y ofreciéndole flores
que encontró a su puerta,
le observa.

Pero él no quiere la vida,
no quiere flores,
prefiere sus heridas
que le duelen y le pican,
elige un supurar de hielo
frío y eterno.

Así que ella se marcha
de aquella gruta
decorada de hiel
y oliendo a frío,
tapada con su manta
hecha de mimos,
de caricias que la sobran,
de amor infinito,
abrazos sin murallas
y su ser limpio.

Podría jugar
a ser la Bella y la Bestia,
más los cuentos de hadas
no la interesan,
vivió un día el mismo
y acabó muerta,
así que, al cerrarse la puerta,

la vida de ese ser le da pena
y pide al amor que lo cuide,
que lo meza en sus brazos
y lo enternezca,
lo que ella no está dispuesta,
aunque a ello la enseñaron
cuando era pequeña.

miércoles, 4 de agosto de 2010

El regalo

Guárdalo,
el regalo de niña
en palabras escrito,
en sonrisas recreado,
creando delirios,
envuelto en sorpresa
este toma y daca con tino.

Te regalo el tiempo,
de mis frases,
del ingenio que nos nace,
un regalo de aprecio
a lo que sé que eres,
lo que conmigo has sido,
jugando a ser quien quieres.

El momento,
que no nos gana la batalla
para vivirlo pleno,
entre el regalo de versos
en el que cuidar mi niña,

la que escondo de los necios,
tus versos,
en los que asomas tu ángel
con agrado y con acierto
y mi niña en su inocencia
lo reconoce sin miedos
y sale y juega de nuevo,
cuidada por su mirada
y tranquila 
en el abrazo de tus versos.

Te regalo esta cajita,
donde meternos dentro,
tú a tu ángel,
yo a mi niña
y dejarles ahí en silencio,
tranquilas las miradas,

abrazándonos en textos,
cómplices entre poesías
y sobre todo,
sin recelos necios
porque sabemos
que es nuestro juego.



martes, 3 de agosto de 2010

Nada más

Me creo mi historia
y va creciendo,
me hago mi vida
con lo que encuentro,
si es bello al bolsillo,
no siendo lo mío 
lo miro y lo dejo.

Solo es la vida
y nada más lo que desprendo,
ganas de vivir de pleno,
sentir los sueños,
saborear lo bello
de quedarme con lo bueno.

Así voy creciendo
y pasando duelos
o nuevos encuentros,
descubriendo mi yo interno,
la ternura en la vida,
la amistad en un beso,
el amor en una gota,
la verdad de un gesto
y nada más que eso.

Nada más que libre,
tan libre que hay veces, 
que ni yo me entiendo,
y pienso que
si me sorprendo a mi misma,
que sentirán los terceros
al cruzarse con mi historia,
con mis silencios,
en mis ilusiones encendidas
o en apagados proyectos
y yo les entiendo por ello,
porque no es fácil sentirse
nadando entre los adentros.