Nadie me hubiera dicho jamás que sin conocer a una persona se podría sentir algo por ella, que con cuatro letras una persona lograra sentir tanto en tan poco tiempo.
¿Qué siento?
¿Qué es ese pensamiento que continuamente me perfora la mente?
Un parte de mi me dice que mejor no saberlo y la otra que mejor tenerlo, aunque con eso se rompa el encanto que guarda.
Para concluir una parte de mi trabajo te regalo este diario para que cuentes a la gente todo lo que para ti es importante en tu vida, sea bueno o malo.
A veces me siento tan débil y vulnerable como un barco de papel azotado por las olas del mar.
Eternamente tuyo tu Ángel de la Guarda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dedicar tu tiempo a este blog y compartir tu opinión