sesgando vida,
ilusiones, promesas,
la fe y el día.
Cortando corazones,
cortando caricias,
abrazos, miradas,
ángeles y hadas.
Arrasando con dolores,
arrasando las palabras,
bosques, cielos,
estrellas y esperanzas.
Esclavos de sus bajezas
viven los destructores,
esclavos de sus miserias,
de su nadiedad,
de su ansia, su codicia,
de su crueldad esparcida.
Prisioneros de su ego,
de la falta de amor,
ese que encierran en su averno
y lo cambian por dolor.
Duro trabajo vivir esa vida,
sesgando, cortando,
arrasando,
siendo esclavo,
prisionero,
duro trabajo y por ello,
me alejo de vosotros,
necios y bellos,
aún así,
pena os tengo
por lo que hacéis
y habéis hecho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dedicar tu tiempo a este blog y compartir tu opinión